Halloween, el refugio del olvido (Historia completamente interactiva)

El Refugio del Olvido / Leer el libro / Explorar el sótano / Destruir el círculo / Huir rápidamente / Buscar refugio

En su desesperación por escapar de las sombras que los acechan, tropiezan con una puerta oculta en una pared de la mansión que antes no habían notado. Una sensación de alivio inmediato inunda a todos. Las sombras han dejado de seguirlos tan de cerca, como si este lugar estuviera protegido de la energía oscura que infesta el resto de la casa.

“Aquí estaremos seguros,” dice uno de ellos, intentando convencerse a sí mismo tanto como a los demás. Dentro del espacio oculto, todo parece extrañamente calmado. Las paredes están cubiertas de polvo, pero no hay signos de movimiento reciente. Las luces de las linternas revelan viejos muebles cubiertos de telarañas, libros desmoronándose en estanterías abandonadas, pero, sobre todo, una calma densa y pesada.

El grupo cierra la puerta detrás de ellos, seguros de haber escapado finalmente del peligro. Sin embargo, algo está terriblemente mal. La calma es demasiado profunda, demasiado sofocante. Al principio, no lo notan. La adrenalina sigue corriendo por sus venas, el miedo aún arde en sus cuerpos. Pero luego, poco a poco, se dan cuenta de que el silencio que los rodea no es natural. No hay ecos, ni sonidos de viento. Nada cambia.

Pasan los minutos, luego las horas. Ethan, impaciente, decide que es momento de salir, pero cuando intenta abrir la puerta, esta no cede. La puerta que parecía ser su salvación se ha convertido en una barrera impenetrable. La desesperación comienza a instalarse nuevamente. “No puede ser,” murmura uno de ellos, tirando de la puerta con todas sus fuerzas. Prueban la ventana, pero no hay salida por allí tampoco. Las paredes parecen cerrarse a su alrededor, aunque cuando las tocan, siguen siendo frías y sólidas como el concreto.

Empiezan a buscar desesperadamente otra salida, pero todo conduce al mismo lugar: un espacio cerrado, sin escapatoria. No importa cuánto exploren, parece que la sala se estira y contrae a su antojo, jugando con su percepción del espacio.

El tiempo pierde sentido. Uno de ellos mira su reloj, pero la aguja del segundero ya no se mueve. Los días y las noches parecen fusionarse en una eternidad estática, sin distinción entre el paso del tiempo y el espacio en el que están atrapados. No envejecen, no sienten hambre ni sed, pero tampoco encuentran consuelo. El mundo exterior ha dejado de existir para ellos.

La realidad finalmente se estrella sobre ellos: no hay salida. El lugar que pensaron que los protegería no era un refugio, sino una trampa cuidadosamente diseñada por la mansión, un último truco macabro. Han sido capturados, no por las sombras, sino por la misma esencia de la mansión, un espacio que existe fuera del tiempo y el espacio.

Sus pensamientos empiezan a distorsionarse. Al principio, intentan mantener la cordura, hablar entre ellos, pero poco a poco las palabras se vuelven huecas, los rostros familiares parecen extrañamente distantes. Los recuerdos del mundo exterior se desvanecen, como si la mansión estuviera devorando lentamente su identidad, su humanidad. Intentan recordar por qué estaban allí, qué estaban buscando, pero las respuestas se escapan de sus mentes.

Con el tiempo, uno de ellos se sienta en el suelo, agotado, y dice con voz monótona: “¿Cómo llegamos aquí?”. Nadie puede responder. El propósito de su existencia ha desaparecido, y ellos también comienzan a desaparecer, de una manera que no involucra la muerte física, sino algo mucho más inquietante: la disolución de su ser.

Finalmente, uno de ellos se da cuenta, aunque ya es demasiado tarde: la mansión nunca fue su enemiga. No era la maldición lo que los acechaba, sino su propia necesidad de escapar, su deseo de control. El refugio que encontraron fue una proyección de su miedo, de su incapacidad para aceptar que, a veces, no hay una solución sencilla a las fuerzas que escapan de nuestro entendimiento. La mansión simplemente reflejó su debilidad, atrapándolos en un ciclo de ilusiones y desesperación.

Reflexión final

El final es inquietante porque plantea una pregunta perturbadora: ¿Qué sucede cuando intentamos escapar de algo que no podemos entender? El grupo nunca entendió verdaderamente la naturaleza de la mansión, ni de las sombras que los perseguían. Lo que creían que los atacaba era, en realidad, una parte de ellos mismos, una representación de su miedo, su inseguridad y su necesidad de encontrar una salida. Al buscar refugio en lugar de enfrentar la verdad, se encerraron en una prisión de su propia creación.

La verdadera maldición no estaba en la mansión, sino en ellos mismos. La mansión solo les ofreció un espejo, un reflejo distorsionado de sus propios demonios. Y en su intento desesperado de huir, lo único que lograron fue encarcelarse para siempre en el lugar más oscuro de todos: su propia mente.

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Gracias por participar en esta terrorífica historia interactiva. ¡Esperamos verte de nuevo en próximas aventuras!

Acerca de
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Rafa García

Me apasiona la fantasía y la mitología, y formo parte de Equilibria, donde ayudo a que el universo creado por la escritora Gemma N. Escarp cobre vida en el mundo digital. Me dedico a crear contenidos, apoyar a la comunidad y construir un espacio donde lectores y escritores puedan conectar con la ficción especulativa de una forma cercana y accesible. Mi objetivo es que quienes aman este género encuentren en Equilibria un lugar donde sentirse parte de algo más grande, lleno de imaginación, historias y colaboración.

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